Noticias - página 8 @ Puerta del Parral: Centro de día para mayores en Burgos
tratamientos terapéuticos personalizados

La Musicoterapia en el Centro Terapéutico

  • Musicoterapia
  • Terapia Personalizada
  • Comunicación

La musicoterapia es el conjunto de actividades que utilizan el estímulo musical como herramienta terapéutica. Está enfocada a proporcionar una estimulación sensorial adecuada para la mejora del estado de ánimo, a la vez que potencia la dimensión relacional.

Esta terapia se dirige a un grupo de personas, especialmente con deterioro cognitivo, y ayuda a mejorar la orientación en la realidad, aumenta la capacidad de atención y concentración, ayuda al aprendizaje y mantiene o mejora las habilidades verbales y de comunicación.

La musicoterapia promueve la relajación, disminuye la ansiedad y la agitación y ayuda a mantener la movilidad de las articulaciones. Aumenta la comunicación social, reduce y previene el aislamiento, aumenta la autoestima y en definitiva aumenta las habilidades sociales.

La terapeuta trabaja en grupo, utilizando varios instrumentos musicales, música, grabaciones, materiales sonoros, sonidos corporales, etc. Los instrumentos son elaborados por los propios usuarios, al igual que otros muchos materiales que utilizan, desarrollando así la creatividad, y dando lugar al aprendizaje de técnicas artísticas y ante todo, trabajando la expresión emocional y la comunicación.

Isabel García García

Terapéuta Ocupacional

Enlace permanente al artículo

La Musicoterapia en el Centro Terapéutico

SOS, ¡Me han diagnosticado Alzheimer!

  • Alzheimer
  • Memoria
  • Terapia Personalizada

¿ Qué sintomas presenta una persona con Alzheimer? Pérdida de memoria, desorientación en el espacio, en el tiempo y en su propia persona, apatía, conducta desinhibida. Podríamos enumerar más síntomas que la definen, ¿ verdad?.

El neurólogo, junto con la evaluación neuropsicológica, fundamental para confirmar la sospecha ( criterios NINCDS-ADRDA), puede dar respuesta al por qué de estos déficits. Una vez confirmada, a uno/a se le coloca la etiqueta de "enferm@ de Alzheimer, se pauta un tratamiento y se realiza un seguimiento. A veces, se recomienda participar en talleres de estimulación cognitiva y mantener actividad física diaria. Y, finalmente, se le manda a su casa.

En pocas ocasiones se informa sobre el impacto emocional que esta enfermedad provoca tanto en /la enferm@", como en la familia, sobre todo, en el/la cuidador/a principal.

"¿ Es normal que sienta que la persona que tengo delante ya no es la misma que antes de padecer esta enfermedad?", " Me siento un inútil, ¿es normal?, " Ya no soy el/la que era antes, tengo ganas de desaparecer". Probablemente estas frases sean de las más escuchadas por los psicólogos que trabajamos en el ámbito de la tercera edad.

Estas preguntas que ambos se hacen necesitan respuesta para lograr un afrontamiento "psicologicamente sano". Ahí los/as psicólogos/as tenemos gran trabajo, por un lado con su autoestima, y por otro, con el duelo por la "perdida de la " persona que era ante y que ya no es".

La autoestima se ve alterada sobre todo al inicio de la enfermedad, cuando aún son conscientes de que algo ocure y observan que en cierta manera, no son las mismas personas que hace unos meses o unos años. Es por esto, por lo que es necesario que profesionales y cuidadores/as comiencen a interesarse más por tratar esa parte del cerebro que se conserva bien, donde residen las neuronas que están vivas, antes que la que está dañada, donde hagamos lo que hagamos, las neuronas están muertas. De hacerlo al revés, caemos en el riesgo de un empeoramiento global.

En cuanto a por qué el duelo, que quizás haya personas que se pregunten por qué trabajar esto si la persona está viva, señalar que se comienza a elaborar desde el primer segundo que conoces el diagnóstico. Duelo que viven tanto el/ la cuidador/a, como el propio enfermo. Y es que , no debemos olvidar el duelo, en su más amplia definición, es el proceso de adaptación que sigue a toda pérdida ( de una relación, de mi "yo" antes de una enfermedad).

La repercusión que tienen estas áreas en el entorno familiar, ha sido el detonante para que actualmente, recursos como Centros de Día, cuenten con psicólogos que no sólo se encarguen de realizar actividades encaminadas a la ralentización del deterioro cognitivo, si no a trabajar áreas emocionales que permitan a la persona afectada y a su familia, una mejor calidad de vida y un menor impacto en sus vidas. Y especifico centros de día, porque innegablemente son lugares donde se intenta dar la máxima independencia al paciente y permiten establecer un engranaje perfecto entre ambiente terapéutico y entorno familiar.

Finamente subrayar que hoy en día , este tipo de enfermedad aparece en más población y a edades más tempranas. Es po ello, que es hora de que los profesionales que trabajamos en el campo de la psicología, nos planteemos velar por parcientes con una mejor calidad de vida emocional y no tanto por conseguir que no olviden que 2+2 son 4.

Inmaculada García Jorge

Neuropsicóloga del C.D Puerta del Parral

Enlace permanente al artículo

SOS, ¡Me han diagnosticado Alzheimer!